Para hacer canotaje no hace falta irse hasta el Colca. A solo dos horas de la capital está Lunahuaná, el paraíso de la aventura. Al otro extremo, Cerro Azul lo espera con su opción de relajo y con sus bucólicos atardeceres.
Todos ya lo saben: muy cerca de la capital está Lunahuaná, el paraíso del canotaje, la bicicleta de montaña, los vinos y los camarones. La localidad está esperándonos siempre con su oferta para un fin de semana de aventura, donde ningún visitante querrá dejar de meterse al agua y sentir la adrenalina que produce el cabalgar en los rápidos del vigoroso río Cañete, que discurre en zigzag por la parte media y baja del valle.
Si va con toda la familia, puede acampar al borde del río o pernoctar en sus hospedajes, que tienen precios al alcance de todos. Y del clima ni se preocupe. Es perfecto. Con el calor exacto, la brisa precisa, sin lluvias y maravillosamente seco, lejos de la espantosa humedad limeña. Eso sí, hay que cuidarse de los mosquitos por la tarde.
Con el auge del pisco, muchos viejos alambiques con más de 200 años de antigüedad han vuelto a producir licores de muy buena factura. Hay piscos puros y acholados que han ganado más de un campeonato nacional. Igualmente, la miel de abeja es uno de los fuertes de la zona. Especialmente la hecha con abejas que polinizan paltos: la miel sale negra y espesa. Si a todo esto, usted le suma un chupe de camarones y un soberbio arroz con pato hecho con leña, entonces podrá decir que estuvo de paso en el paraíso.
CERRO AZUL:Cañete no solo es río y laderas; también tiene playas, y de las mejores. Una de ellas es Cerro Azul, una hermosa caleta que cobija un vetusto muelle desde donde se puede divisar, a lo lejos, un enjambre de tablistas tratando de agarrar una ola cerca de una singular formación rocosa conocida como El Fraile. Aunque la brisa y el atardecer le dan un aura de levedad al ambiente mientras se camina por aquel largo y carcomido muelle curvo que se interna en el océano, hay que saber que cada paso que dé va cargado de historia. De aquí partió, en 1971, el último barco (un mercante griego) atiborrado con azúcar antes de que el valle languideciera por la Reforma Agraria.
DATOS:Cómo llegar: Lunahuaná está ubicado a 38 km al este de San Vicente de Cañete, a la altura del kilómetro 182 de la carretera Panamericana Sur. El viaje desde Lima dura en promedio 1.5 horas, y el costo del pasaje varía entre 10 y 12 soles. Desde la plaza de Cañete se puede tomar un colectivo al valle por 3.50 soles.
Dónde dormir: Hay hospedajes desde 20 soles. Si desea una opción más barata, lleve su bolsa de dormir y acampe en el malecón Aráoz por 10 soles (el lugar cuenta con servicios higiénicos). También puede acampar gratuitamente en la ribera del río Cañete.
Recomendaciones: Incluya en su equipaje abundante repelente para los mosquitos.
http://www.peru21.com/p21impreso/Html/2007-10-30/imp2hojasruta0805767.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario